Los perros han sido por muchos años los mejores amigos de los seres humanos, su capacidad de adaptación y su virtud de ser fieles, le ha proporcionado el don de ser los compañeros preferidos en el hogar, estos animales han logrado desarrollar una gran intuición que le ha permitido comprender cosas al instante sin necesidad de utilizar la razón, esta le ha permitido la percepción de determinados sucesos antes que estos ocurran, es decir, han desarrollado un don de anticipación o de sexto sentido.
Ellos también tienen la capacidad la anticipar si un niño epiléptico va a sufrir un ataque de la enfermedad, esto se produce debido a que los perros tienen desarrollado el olfato y los cambios metabólicos que se producen cuando se va a producir un ataque epiléptico son percibidos por estos animales, los cuales empiezan a ladrar, lamer y otras conductas para llamar la atención de manera de avisar que se va a producir ataque epiléptico, los perros parece desarrollar esta habilidad de forma natural pocos meses después de mudarse con una familia que tenga uno de estos casos. También los perros pueden intuir las bajas de azúcar de las personas diabéticas y percibir las desmejoras de sus dueños debido a la enfermedad, lo que se han convertido en una herramienta muy útil en el tratamiento de la enfermedad.
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